Actualmente existen empresas que se resisten a la implementación de tecnologías en sus procesos, incluso hay quienes lo consideran gastos innecesarios y no una inversión, sin embargo en esta ocasión queremos desmentir mitos y convencerte de que un sistema ERP representará un retorno de inversión en tu empresa.
La implementación de un sistema ERP de calidad en tus operaciones te brindará diversos beneficios en la rentabilidad y productividad de tu negocio, los cuales serán medibles y evidentes en los resultados.
¿En qué áreas se refleja un retorno de inversión con un ERP?
Un sistema Enterprise Resource Planning (ERP) tiene como función principal gestionar, administrar y controlar los procesos y recursos de una empresa de manera sistematizada y rastreable.
Con un sistema ERP se manejan los módulos de producción, logística, inventarios, facturación etc, y el retorno de inversión se ve mayormente reflejado en los departamentos de administración, producción, compras, ventas, finanzas y contabilidad.
El retorno de inversión se verá reflejado en todas las áreas que abarque tu ERP, pues al gestionar de la manera más optimizada tu empresa, reducirás muchos gastos desde personal, insumos, infraestructura o incluso los eliminarás.
¿Cómo un ERP traerá retorno de inversión a tu empresa?
Un sistema ERP es un sistema que gestiona procesos y, al no generar ventas como tal, muchas empresas deciden que no es un gasto que beneficie a su economía, sino que más bien la afecta.
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Sin embargo, nada más lejos de la realidad. Invertir en un sistema ERP genera un retorno de inversión de muchas maneras que nada tienen que ver con ventas, sino con eficiencia.
Para explicarlo empecemos con entender un término clave que es ROI.
ROI es una fórmula financiera que compara la utilidad o los beneficios obtenidos por una inversión, en este caso, la implementación de un ERP. Los beneficios de implantar un sistema de gestión a tu empresa pueden ser tangibles o intangibles:
Los beneficios tangibles
- Reducción de costos de tecnologías de la información
Desde la reducción de personal para esta área hasta el ahorro de costos de licencias cuando el ERP se implanta en la nube.
También se reducen los gastos en infraestructura de software y se eliminan los gastos de mantenimiento. Con un sistema ERP toda tu información y procesos se almacenan en una nube, existiendo un ahorro de servidores físicos.
- Incremento de la productividad
El incremento de productividad es algo que se puede medir. Los empleados ahorran tiempo gracias a la automatización de la integración de datos, y hay una reducción de costes laborales debido a la mejor asignación de recursos.
Además se disminuye el tiempo e imprecisiones debido a la administración de datos en un sistema unificado, se eliminan las dobles entradas de datos únicos que otorga conveniencia y reducción de tiempos, así como aumenta la eficiencia en producción gracias a la mejor administración de equipos, personal y maquinaria.
Se reducen los desperdicios de materiales, reducción de trabajo en curso y mejora de la gestión de stock.
Los beneficios intangibles
Estos son más difíciles de determinar y cuantificar y entre ellos destacan:
- El aumento de la visibilidad
Es el más difícil de medir pero es el que causa mayor impacto al mejorar la calidad de datos, pues se tiene la información a la mano para tomar mejores decisiones de negocio y más rápidamente.
Además se mejora la fiabilidad y seguridad de los datos.
- Beneficios intangibles más genéricos
La mejora de la imagen corporativa, el aumento de clientes, ventas y fidelización gracias a la implantación de un sistema ERP son algunos de estos beneficios.
También la mejora del servicio y atención al cliente, mejor control contable y ciclo de ventas más ajustado.
La estandarización de procesos, la disminución de complejidades en los procedimientos, la reducción de errores potenciales, la precisión de mejorada de los datos de inventario y de envíos, la integración con múltiples sistemas dan como resultado una mayor eficiencia y transparencia.
¿Cómo estos beneficios generan un retorno?
Además de representar una ventaja en tiempos, organización, gestión de procesos y bases datos, un sistema ERP reduce, reemplaza y elimina diversos gastos, los cuales van desde el personal operativo, errores humanos que muchas veces pueden ser costosos, infraestructura, etc.
Por ello, no hay un punto de comparación entre una empresa que opera con apoyo de herramientas digitales a aquellas que siguen considerándose un gasto innecesario y operan de manera tradicional.
En conclusión, las bondades de integrar un ERP a la operación y administración de una compañía incrementa la eficiencia del personal y reduce gastos fijos y de infraestructura.
Estos insumos a la larga resultan gastos incluidos millonarios, por lo que siempre será más conveniente trabajar con un sistema que optimice los procesos operativos que generen un retorno de inversión a largo plazo.
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