En las últimas semanas, un tema que ha estado aquejando a los gobiernos y a los consumidores de hidrocarburos, como el gas y la gasolina, ha sido el alza de los precios de combustibles a nivel mundial.
Esto ha causado una crisis económica, pues a pesar de que el gobierno de México ha contrarrestado los embates debido al alza, se espera que tarde o temprano se liberen unos nuevos y altos precios fijos.
Y es que una de las razones que ha detonado estos incrementos alrededor del mundo, es el conflicto bélico que mantienen los países de Rusia y Ucrania.
Rusia es un importante productor de petróleo y exportador de combustibles en todo el mundo, y el bloqueo que ha sufrido debido a las sanciones impuestas, han provocado una crisis de oferta y de precios.
Todo lo anterior, ha alertado a los consumidores, y también a las empresas que utilizan transporte para llevar a cabo sus operaciones, sea cual sea su giro.
Las compañías que cuentan con su propio transporte para llevar a cabo sus actividades, o aquellas que contratan servicios como, por ejemplo, de paquetería, traslado de personal y de mercancías, entre muchos otros, se verán afectadas debido a los incrementos ya mencionados.
Es inevitable que, la volatilidad en el precio de los combustibles afecte a estos negocios en los costos de sus operaciones, y se verán en la necesidad de crear nuevas estrategias para tratar de mitigar y contener el golpe a las finanzas en empresas con sistemas de transporte internos o que los utilizan cotidianamente de manera externa.
Es importante prevenir y comenzar a analizar los planes que se implementen para contrarrestar las consecuencias del alza en los precios de combustibles.
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¿Cómo mitigar los altos precios de combustibles?
Para las empresas que realizan algunas de sus operaciones a través del transporte, ya sea interno o por servicios contratados de mensajería, intermediación u otras necesidades, es importante establecer estrategias no solo de prevención, sino también de optimización de los costos y gastos.
Ante la inevitable inflación en el precio de combustibles, es necesario llevar a la práctica estrategias para contener los gastos.
Entre los planes que pueden trazarse para evitar el impacto económico del incremento de combustibles en las empresas, se encuentran:
- Planificación de rutas.
Para cualquier actividad que la empresa deba realizar y que sea necesario la utilización de transporte, se debe tener una alta comprensión y una evaluación constante de la red de transporte y de las rutas que lleven un menor recorrido.
Sin embargo, es esencial estar alineado con productores, proveedores y distribuidores para optimizar los gastos de transporte y tratar de contrarrestar los incrementos de forma sustancial.
Evitar transitar por vialidades largas o en malas condiciones, representa un ahorro en combustible y en mantenimiento.
- Evaluación de alternativas.
Es esencial evaluar las prioridades, por ejemplo, si el uso del transporte en las empresas es fundamental para llevar a cabo las operaciones y las actividades de la compañía.
De ser así, se tiene que medir si la frecuencia del uso de transporte es posible disminuirla priorizando escalonadamente, o bien, hacer más con menos.
Después, llevar a cabo un análisis en el que se valore si el transporte puede ser sustituido por otro, el cual, su costo sea menor.
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Fijar un presupuesto de transporte.
Es sencillo: si no se puede medir, no se puede controlar ni administrar.
De esta manera, es necesario determinar un presupuesto semanal o mensual para cubrir las necesidades de transporte, ya que, de no hacerlo, las fugas de estos costos pueden ser muy elevadas, sobre todo tomando en cuenta los incrementos en los combustibles.
- Monitoreo para evaluación de gastos.
Realizar una supervisión para establecer las necesidades reales y disminuir costos innecesarios es una buena forma de verificar el funcionamiento en actividades que involucren transporte.
Monitorear a los transportistas en tiempo real permite saber lo que ocurre en cada ruta.
De ocurrir alguna situación que no se tenga contemplada, solo provocará que se generen gastos adicionales que afectan el ahorro de costes, ya sea por entregas fallidas, por un incremento en el consumo de combustible o por disminuir la cantidad de actividades que se pudiesen realizar en una misma ruta.
De esta manera, el monitoreo permite evaluar la situación para tomar medidas correctivas inmediatas e identificar actividades que estén generando costos ocultos.
Medidas inmediatas para las empresas.
A pesar de que recientemente el Gobierno de México informó que habría un incremento en los combustibles, se espera que, en la segunda semana de abril, estos se liberen para establecer su nuevo precio.
Ante esta situación, las empresas que utilizan transporte, deben comenzar a idear un plan que ayude a contrarrestar los efectos de este aumento.
Si no se puede prescindir del transporte, deben implementarse mejoras para la optimización de su uso o, en su defecto, la sustitución de estos servicios.
Las acciones de una empresa no deben únicamente estar enfocadas en incrementar sus precios y aumentar sus costos si los mismos suben, regirse de esa manera, es no tener un plan o una alternativa eficiente para controlar y estudiar el mercado en función de los incrementos.
Deben implementarse estrategias a tiempo, innovadoras y correctamente planificadas para mitigar, por lo menos, temporalmente, el alza en los precios de combustibles.
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Fuentes: Beetrack.
